La dieta BARF consiste en alimentar a perros, gatos y otros animales domésticos a base de una dieta compuesta por alimentos crudos y apropiados a su especie.
Los perros, gatos y hurones son animales carnívoros (gatos y hurones carnívoros estrictos) y alimentarlos con piensos y productos altamente procesados, nunca será lo más adecuado para su biología.
Beneficios:
Desventajas:
A continuación os detallamos, a grandes rasgos, en que consiste la dieta Barf y sus componentes.
Esta dieta se compone básicamente de huesos carnosos, carne/pescado, vísceras y verduras/frutas. Las proporciones de estos alimentos varían en función de cada especie.
En perros adultos dependerá de su raza, tamaño, nivel de actividad, si está castrado o no, de su metabolismo y de la época del año (en verano comen menos). Oscila entre un 1,5% de su peso ideal (para perros muy grandes, tipo Gran Danés) y un 5% de su peso (perros muy pequeños y nerviosetes, tipo Jack Russel).
Se pueden ir variando las cantidades, según vemos si el perro adelgaza o engorda, o en función del nivel de actividad que tengamos en ese momento
Huesos carnosos:
Deben ser siempre huesos crudos y bien recubiertos de carne alrededor, no se pueden dar NUNCA huesos pelados o cocinados
Los clasificaremos según su nivel de dificultad. No están todos los posibles huesos carnosos, pero sí los más habituales.
Carne:
La clasificaremos según porcentaje de grasa. También os propondremos otras carnes, menos habituales pero también importantes en la dieta
Pescado:
Sobre todo pescados azules con mayor porcentaje de Omega3.
Verduras/frutas:
Variar según temporada. Las verduras mejor cocidas al vapor y no abusar de las frutas, por su gran contenido en azúcares.
Hígado:
Puede ser de cerdo, ternera, pollo, cordero…. indispensable en la dieta, aunque no debe excederse la proporción diaria del 5%.
Otras vísceras:
Bazo, criadillas, páncreas, riñones, sesos…